El suicidio es un problema grave que cobra la vida de más de 700,000 personas al año a nivel mundial, dejando a millones de familiares y amigos en un doloroso proceso de duelo.

Perder a un ser querido por suicidio genera una mezcla abrumadora de emociones, como culpa, ira y tristeza, y a menudo está acompañado por el estigma social.

En ocasiones, puede resultar crucial que los allegados reciban asistencia emocional y psicológica para estar acompañados en el procesamiento de su dolor y la reconstrucción de sus vidas. La terapia, tanto individual como grupal, puede ser crucial en este proceso, permitiendo encontrar maneras saludables de enfrentar la pérdida.

Cada duelo es único, pero buscar ayuda profesional y conectarse con grupos de apoyo puede marcar una gran diferencia en la sanación.

A continuación, y sin ánimo de ser exhaustivos, ofrecemos a continuación un listado con algunos recursos útiles para familias/allegados de personas fallecidas por suicidio:

 

 

Para leer el artículo completo sobre publicado hace unos meses sobre “La vida sin la persona fallecida”; acceda a través del  enlace que se encuentra en la pagina web de la Fundación para la Investigación en Psicoterapia y Personalidad (FUNDIPP): https://fundipp.org/la-vida-sin-la-persona-fallecida/